El Romanticismo es un movimiento cultural que se originó en Alemania y en el Reino Unido a finales del siglo XVIII, como una manera de oponerse a la racionalidad que exponía el siglo anterior, es decir, el siglo de las luces. Se muestra como una revolución en la manera de expresarse, la manera de pensar, de vivir y por supuesto sentir.
Un ser romántico es alguien ajerna a su contexto, el sujeto romántico está inmerso en su propia realidad, es un ser tan individual que facilmente podemos llamarlo egoísta.
Sabe que es un ser humano y como tal limitado en todos los sentidos; quiere poseerlo todo pero no puede y esto le produce una frustración de por vida.
Ama con pasión, no razona, solo quiere complacer sus deseos pasionales pero al parecer el destino se opone a ello y el sujeto romàntico no puede hacer nada al respecto.